El Avisador de Badajoz

Malas noticias para la prensa escrita en Badajoz, ahora que 2014 va a echar el cierre. Si cada vez se lee menos prensa en papel y no termina el goteo de despidos de periodistas y redactores pacenses, en la céntrica plaza de Conquistadores, junto a El Corte Inglés, acaba de desaparecer el último kiosco de prensa de la zona. Si recordáis, había dos, uno, el del orondo Manolo, en la parte superior de la plaza, junto a la farmacia de Julián Castaño Poblador, y, ahora, ha desaparecido, como de cuajo --sólo queda la base de cemento--, el segundo, al principio de la avenida de Enrique Segura Otaño, junto a la parada de autobuses urbanos, regentado, en sus tiempos, por una familia de etnia gitana. Con lo que los viandantes del concurrido lugar se han quedado a la luna de Valencia para comprar sus periódicos y revistas favoritos, además de tabaco, agua y refrescos, las clásicas chuches y golosinas infantiles y, ya que estamos en estas fechas, los botes de "nieve" y otros artículos navideños y de broma.