Sonetos albertianos para La Música del Caminante, de Nando Juglar

Por El Avisador - 17 de Marzo, 2014, 20:22, Categoría: General

Pedro:

Te envío los sonetos que Alberto González recitó en el acto de La Música del Caminante del pasado dia 7 de febrero, en el Auditorio Siglo XXI de la Fundación Caja Badajoz, por si pudieras publicarlos y, así, las personas que no pudieron estar, los puedan leer ahora.

Un abrazo fuerte.

Nando Juglar
nandojuglar@hotmail.com

***
I. EL POETA Y EL CANTOR
Ambos tienen por patria la poesía,
ambos siguen por guía sus amores,
 ambos son caballeros trovadores,
ambos tañen la misma melodía. 

Ambos van de su gozo a su elegía,
ambos tejen en verso sus primores,
ambos sienten la luz y los dolores,
ambos viven en idéntica armonía. 

Uno es Luís, el maestro jerezano;
el enteco filósofo aldeano,
 tan profundo, tan tierno y tan humano. 

El otro, nuestro Nando trovador,
el bardo caminero y soñador,
mitad aedo y mitad cantor.  

II. LA ESTRELLA 
Sobre la peripecia de un lucero
y el agua, y las nubes, y la luna,
engarzando emociones una a una
nos conduce este dúo compañero. 

Uno, multicolor y volandero,
trovero trotamundos de fortuna;
el otro sin dejar nunca ninguna
emoción en el fondo del tintero. 

La balada enternece de sencilla:
la inocencia del amor limpio y sincero
de dos niños que aman a su madre. 

Lo que siente el corazón cuando se abre
con afán de ofrecer el mundo entero
a quien lo germinó de una semilla.

III. NANDO JUGLAR
Por la tierra extremeña campeador,
jerezano bajo torres bien nacido,
entre brezos y jarales bien curtido,
Nando Juglar es un músico escritor. 

Lo que ahora se llama cantautor,
que es lo que el que canta siempre ha sido, 
cuando hermano de otros ha sentido
compromiso al hacerse trovador. 

Usando como pluma la guitarra
para escribir en el aire su clamor
con su voz abre el surco de la arada
  
al que segura se aferra con su garra
la promesa del brote de verdor
que cosecha su alma enamorada.  

IV. LUIS GONZÁLEZ WILLEMENOT
Fue su vida y su destino,
y ese ha sido su corazón total y verdadero:
el Jerez del barroco caballero
y su verso de poeta estremecido. 

No importa cuanta gloria ha conseguido,
lo que importa de su andar es el sendero:
hacia arriba enfilando hacia el lucero;
hacia abajo como un grito en el olvido.

 Se alimentó con el pan de su poesía
cosechado en el surco de su frente 
con los granos del vivir de cada día. 

Fructífero trabajo fue su arada,
por eso creció tanto su simiente 
y se marchó con Dios como si nada.
Alberto González Rodríguez
7  Febrero 2014

Permalink ~ Comentar | Referencias (0)

Calendario

<<   Marzo 2014  >>
LMMiJVSD
          1 2
3 4 5 6 7 8 9
10 11 12 13 14 15 16
17 18 19 20 21 22 23
24 25 26 27 28 29 30
31       

Categorías

Archivos

Sindicación

Alojado en
ZoomBlog