La que ha liado estos días atrás el presidente de la AA. VV. de
Pardaleras, José Luis López Trinidad. Y es que ha pedido a la del Casco
Antiguo, la que comanda José María Soriano Llamazares, que el vanguardista Palacio
de Congresos de Badajoz "Manuel Rojas Torres", que está en la mano izquierda de la Ronda del Pilar, pase
a ser "dominio" de la de Pardaleras. Y todo, como paso previo a
integrarse en la Agrupación Vecinal de Badajoz Ibn Marwan, donde están
asociados los colectivos vecinales más poblados de la ciudad. Que los
restantes, más minoritarios, continúan en la CAVE, la Confederación de
Asociaciones de Vecinos de Badajoz. Todo un pésimo ejemplo de división
ciudadana, con su trasfondo político al fondo. Como siempre.
Lo
más ridículo que uno se haya echado al careto en Badajoz en los últimos
tiempos. Como si las barriadas pacenses no tuvieran problemas serios
para que sus asociaciones vecinales se entretengan con estas pamplinas,
despilfarrando tiempo y esfuerzos. Y es que en Pardaleras parece que sobran. O no
tienen nada que hacer, que es lo que me imagino.
Toda una maniobra de imagen para quedar bien delante de sus
convecinos, con la "incorporación" a su territorio de este monumento
emblemático de la ciudad. Pues, ya puestos, habría que recordarle al
ínclito presidente de Pardaleras que el Palacio de Congresos se levanta
sobre el antiguo baluarte de San Roque. Como se enteren en el barrio de
los "machas", son capaces de reclamarlo también para su barriada. Menudos son los de San Roque, tú. Que dirán: ¿por
qué unos sí y otros, no? Y eso sin contar con que mis amigos de
Santa Marina podrían hacer lo mismo con Puerta del Pilar, que antes se
llamó de Jerez y, después, de Santa Marina. Y podrían anexionársela, no
te fastidia.
Pardaleras, tierra de pardales, que dicen los más viejos del lugar. Pardaleras, tierra de pueblerinos sin fronteras, como el tal López, decimos nosotros.